Segunda convocatoria del PERTE Agroalimentario, un impulso al sector en nuestro país

Recientemente, el Ministerio de Industria y Turismo ha lanzado la segunda convocatoria del Proyecto Estratégico para la Recuperación y Transformación Económica Agroalimentario (PERTE-AGRO2), que contará con un presupuesto de 100 millones de euros y cuya fecha de apertura será el 19 de septiembre de 2024, siendo el procedimiento para el otorgamiento de estas ayudas de concurrencia no competitiva.

A partir de este día se podrán presentar las solicitudes y el plazo para las mismas termina el próximo 21 de octubre de 2024. Además, cabe destacar que el plazo de ejecución de los proyectos será desde el día siguiente a la presentación de la solicitud y hasta el 30 de junio de 2026.

Cabe destacar que el PERTE-AGRO2 es una iniciativa que tiene como objetivo transformar y modernizar el sector agroalimentario de nuestro país, significando, al mismo tiempo, un impulso al futuro de este.

En España, la industria de alimentación y bebidas es la primera rama manufacturera del sector industrial, representa el 24,2% del sector manufacturero, así como el 22,6% de las personas ocupadas y el 20,4% del valor añadido del mismo. Asimismo, representa el 2,50% del PIB de España (en valor agregado bruto, VAB).

El número de empresas de la industria de alimentación y bebidas supera las 28.000, lo que equivale al 17,9% de toda la industria manufacturera y el 15,9% del total de la industria, destacando el alto porcentaje de pequeñas y medianas empresas. España se sitúa como la cuarta potencia agroalimentaria a nivel europeo y como décima potencia a nivel mundial y las exportaciones en este ámbito tienen como resultado un balance comercial positivo, que de forma continuada se viene manteniendo todos los años.

No obstante, el sector agroalimentario se enfrenta a desafíos cada vez más notables, como la necesidad de adoptar practicas más sostenibles, mejorar la eficiencia en la cadena de suministro o adaptarse a las demandas cambiantes de los consumidores, tanto a nivel nacional como internacional. Por todo ello, el PERTE-AGRO2 se presenta como una respuesta que podrá enfrentar y resolver estos desafíos y, al mismo tiempo, podrá aprovechar cualquier oportunidad que pueda surgir.

¿cuáles son los objetivos del PERTE-AGRO2?

Esta segunda convocatoria, que se pondrá en marcha en solo unos días, tiene como objetivo consolidar y ampliar las reformas que se iniciaron en su antecesora. Con ella, se busca promover la innovación y digitalización de toda la cadena de valor agroalimentaria, desde la producción hasta la distribución, pasando por la transformación de los productos. Así pues, cabe destacar:

1. Digitalización del sector:

Esta segunda convocatoria, que se pondrá en marcha en solo unos días, tiene como objetivo consolidar y ampliar las reformas que se iniciaron en su antecesora. Con ella, se busca promover la innovación y digitalización de toda la cadena de valor agroalimentaria, desde la producción hasta la distribución, pasando por la transformación de los productos. Así pues, cabe destacar:

2. Sostenibilidad

El PERTE promueve la transición hacia prácticas más sostenibles, incentivando el uso eficiente de los recursos naturales, la reducción de la huella de carbono y la promoción de la economía circular. Este enfoque no solo busca cumplir con los compromisos ambientales internacionales, sino también asegurar la viabilidad a largo plazo del sector.

3. Competitividad y exportación

Esta segunda convocatoria, que se pondrá en marcha en solo unos días, tiene como objetivo consolidar y ampliar las reformas que se iniciaron en su antecesora. Con ella, se busca promover la innovación y digitalización de toda la cadena de valor agroalimentaria, desde la producción hasta la distribución, pasando por la transformación de los productos. Así pues, cabe destacar:

3. Competitividad y exportación

Reconociendo que las PYMEs son el corazón del sector agroalimentario, se establecerán mecanismos específicos para apoyar su modernización y acceso a tecnologías avanzadas. El objetivo es que estas empresas puedan competir en igualdad de condiciones con grandes corporaciones.

Inversiones y financiación

n presupuestos financiables mínimos que variarán en función del tamaño de la empresa y de la línea de actuación, que será una de las tres anteriormente mencionadas.

En el caso de la línea de Investigación, desarrollo e innovación el presupuesto mínimo es de 500.000 euros para pequeñas y medianas empresas y de 800.000 euros en el caso de grandes empresas. Por otro lado, en la línea de sostenibilidad y eficiencia energética y la línea de inversiones para PYMEs, el presupuesto mínimo será de 200.000 euros para pequeñas y medianas empresas y de 400.000 para las grandes empresas.

Estas subvenciones pueden varias entre el 10% y el 70% de los costes elegibles, dependiendo del proyecto y del tamaño de la empresa, con un carácter plurianual y un periodo elegible de gastos que irá desde la fecha de solicitud hasta el mencionado 30 de junio de 2026.

Estas subvenciones pueden varias entre el 10% y el 70% de los costes elegibles, dependiendo del proyecto y del tamaño de la empresa, con un carácter plurianual y un periodo elegible de gastos que irá desde la fecha de solicitud hasta el mencionado 30 de junio de 2026.

Principales beneficios y retos de la implementación

No cabe duda de que la implementación del PERTE-AGRO2 trae consigo muchos beneficios, tanto a nivel económico, como a nivel social y medioambiental. De este modo, con la modernización del sector, se impulsará la productividad, mejorando la rentabilidad de las explotaciones agrícolas y las empresas en transformación. Por otro lado, la apuesta por la sostenibilidad, tan necesaria en pleno siglo XXI, permitirá reducir el impacto ambiental del sector, apostando por la reducción de emisiones de gases de efecto invernadero. Al mismo tiempo, la digitalización e innovación facilitarán la creación de nuevos empleos, mejorando así la competitividad del sector.

En cuanto a los retos y desafíos, uno de los principales es que estas ayudas lleguen de manera equitativa a todo el país, especialmente a aquellas regiones que se encuentran en una situación económica de desventaja. Otro reto es garantizar que la digitalización y la automatización no generen una brecha tecnológica entre las grandes empresas y las pymes. Por ello, es esencial que se establezcan mecanismos de apoyo y de asesoramiento de la mano de empresas especializadas en ello que permitan ayudar a las pequeñas empresas a adoptar nuevas tecnologías de manera efectiva.

En definitiva, esta segunda edición del PERTE Agroalimentario representa una nueva oportunidad muy significativa e histórica para seguir apostando por la transformación de uno de los sectores más importantes de nuestra economía. Con ella, no solo se fortalecerá el sector a corto plazo, sino que se sentarán las bases para su éxito y resiliencia de cara a las próximas décadas y la historia agroalimentaria de nuestro país.

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